Catalina Castro Manríquez
Universidad Católica de Temuco
La analogía de los abrazos se aplica a los discursos, y a los cuentos en el libro de los abrazos y, así lo demostró la actividad por grupos. Los abrazos pueden largos o cortos, auténticos o sosos, etc. y requieren de un ambiente y personas con quienes compartirlos, al igual que las ideas y las opiniones, ya sean originales y de contenido o bien, sencillas y pero concisas, en lo personal prefiero las últimas porque son las que mejor transmiten su mensaje. La calidad de los abrazos y la calidad de las palabras, pueden ser juzgadas por muchos, darles etiquetas y sentidos diferentes a los de sus autores pero, abrazos y palabras al fin, y en su diversidad está su propio valor, ya sea este valorado o subestimado por quienes los reciben. Además, hay abrazos que nos gustan más y otros menos, algunos son aburridos y otros más bien atractivos, y tienen éxito aquellos capaces de conmovernos y hacernos reflexionar como se observó en la diversidad de las palabras compartidas por nuestros compañeros y el mensaje que recibimos de la escucha hacia ellos. En conclusión, la diversidad de los abrazos y de los discursos constituyen su propia riqueza, bien pueden variar en cuanto a calidad y en gustos pero, logran su objetivo al ser compartidos y escuchados por los demás.
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