Bastián Tralma
Estudiante de Psicología
Universidad Católica de Temuco
Al pueblo le asusta la revolución. En primer lugar, porque si no tienes nada, no luchas por nada. Porque hoy es violento el sueldo indigno que no te sirve para nada, solo para generar personas que se centren en sobrevivir y no en vivir, porque este modelo industrializado ha llenado de enfermedad, ilusiones, promesas y burlas, y con esto están matando la empatía y la solidaridad de las personas. En segundo lugar, porque a pesar de que a las personas le gusta cambiar todo, temen cambiar esta sociedad. Las personas cambiar el teléfono, la ropa, de candidato, de automóvil como si nada, pero temen cambiar este paradigma para generar una vida más justa y equitativa para todo el pueblo, teme cambiar esta sociedad, temen cambiarle la vida a la autoridad. Por último, cuánto debemos aguantar para que al pueblo no le asuste la revolución. A cuanto callaran para que el pueblo cambie el paradigma de la tarjeta de crédito, cuántas personas más tendrán que tener hambre para que abramos los ojos y luchemos por un beneficio que nos beneficiara a todos y a todas, cuantos intereses tendremos que tener para que digamos hoy me levanto, hoy rompo esta tarjeta y me cano una vida libre de créditos. En conclusión, Al pueblo le asusta la revolución, porque si no tienes nada, no luchas por nada, porque a pesar de que a las personas le gusta cambiar todo, temen cambiar esta sociedad y por ultimo cuanto debemos aguantar para que al pueblo no le asuste la revolución si la revolución es solo un cambio, un cambio necesario.
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