Saúl Miranda Ramos
México
tiene una gran variedad y riqueza en su gastronomía. Diversos alimentos
provienen de tiempos prehispánicos mientras que otros son de tiempos más
recientes. El origen de los tamales data de la época prehispánica. Los tamales
son alimentos hechos de masa de maíz nixtamalizado, rellenos de alguna salsa o
mole y carne (de pollo, cerdo, guajolote u otro). Estos se envuelven en hojas
de maíz y cocidos a vapor. Ya los aztecas en el peregrinaje de Aztlán hacia
Tenochtitlan, en uno de sus descansos se detuvieron a comer tamales. Esta
imagen se puede observar en el códice Boturini que se encuentra en el Museo
Nacional de Antropología e Historia de la Ciudad de México. Ahora bien, en la
actualidad, entre los tamales también hay una diversidad dependiendo de la zona
mexicana. Uno muy especial es el Zacahuil, que es un tamal que sobresale por
sus características peculiares.
Primero, el
Zacahuil es un tamal inmenso en tamaño; su nombre proviene del Náhuatl y
significa “zacate” o “con sabor a zacate”. Es el más grande de los tamales;
mientras la mayoría de ellos mide entre 15 y 25 centímetros, este puede medir
hasta 5 metros. El promedio en tamaño es de 2 metros. Puede llegar a pesar
hasta 20 kilos. Su cocción en horno puede durar hasta 12 horas. Un solo
zacahuil puede alimentar hasta 70 personas. Comparado con el resto de los
tamales en México, este es un tamal gigante.
El origen
del Zacahuil es, muy probablemente, mexicano. Una de las razones que nos lleva
a pensar así es debido a estar elaborado a base de maíz y este grano tiene
origen mexicano. Las mazorcas más antiguas han sido encontradas en México. Por
otro lado, México es el país con mayor número de variedades de tamales. En
adición, el Zacahuil incorpora diversas técnicas culinarias mesoamericanas como
el nixtamal, la preparación de moles, la cocción bajo la tierra con leña y
piedras calientes.
Aunado, se
tiene registros de que cuando los conquistadores llegaron a México se dieron
cuenta que en la huasteca los pobladores se comían a sus enemigos o a sus adversarios
en un Zacahuil. Incluso, mujeres que habían sido violadas comían en zacahuil a
sus violadores para recobrar la dignidad. El acto de comer carne humana era una
práctica común entre los mesoamericanos. Otra versión de la historia del zacahuil
es que se hacía como una ofrenda a los dioses para pedir un buen clima y pedir
por las cosechas. También como una ofrenda a los muertos. Aunque la historia
hace referencia a la antropofagia, hoy en día el zacahuil está hecho a base de
carne de cerdo, pollo o guajolote.
EL Zacahuil
también se puede hacer en un horno en casa, sólo se necesita lo siguiente:
Ingredientes
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Procedimiento
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1 kg Masa de maíz
nixtamalizado
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1.
Hervir la carne con sal, pimienta, el jitomate y un trocito de cebolla
2.
Asar los chiles y el resto de la cebolla
3.
Licuar los chiles, la cebolla, el jitomate, el ajo, sal, pimienta y
clavos
4.
Revolver la manteca de cerdo con la masa, un poco de sal.
5.
En un refractario extender trozos de hojas de plátano poniendo mecates
de modo que después pueda amarrarse.
6.
Poner una capa de masa y otra de carne alternando hasta terminar con
ambas. La última capa ha de ser de masa.
7.
Envolver el zacahuil y amarrarlo con los mecates.
8.
Hornear a 200°C por dos horas
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70 gr. de chile
ancho
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15 gr. de Chile cascabel
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1 Cebolla
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1 jitomate
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5 dientes de ajo
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c/s Sal
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1 pizca de pimienta
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3 Clavos
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1 pizca de cominos
molidos
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60 gr de manteca de
cerdo
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½ hoja de plátano
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½ kg de carne de
cerdo, pollo o guajolote
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Si no
quieres preparar uno en casa, pero se te antoja, puedes asistir a algún mercado
de las huastecas. Las huastecas se encuentran en los estados de Veracruz,
Hidalgo, San Luis Potosí, Querétaro y Tamaulipas; y es aquí donde
principalmente se cocina y come Zacahuil.
El Zacahuil
es un platillo de fiesta; principalmente para Xantolo. El Xantolo está asociado
a las festividades por los días de muertos. Es una festividad prehispánica en
la que se celebra el regreso de los muertos al mundo de los vivos. Durante
estos días se ofrece a los muertos los mejores manjares para recibirlos con
honores después del largo viaje. Entonces para ellos se cocinan Zacahuiles y se
ofrendan. Estos alimentos se conjugan con otros más, y con danzas, bailes,
cantos, oraciones, entre otras.
Otras
festividades en las que se puede comer Zacahuil es en bodas, bautizos o XV
años; o simplemente en los días de mercado, a final de cuentas un mercado
mexicano es también una forma de festividad.
Este
platillo tiene diversas características históricas, regionales, sobresale por
su tamaño. Hoy en día es un alimento que se sirve en días festivos y siempre
para compartir. Aunque su elaboración requiere sofisticadas técnicas, es
posible prepararlo en casa. Sin duda, el zacahuil es un elemento más engalana a
la gastronomía mexicana.
Referencias:
Galán, M. (s/f).
El zacahuil; el tamal más grande del mundo. El souvenir; turismo gastronómico.
Larousse
Cocina (s/f). Zacahuil.
Más de
México. (2016). Zacahuil; El tamal gigante de lúgubre origen.
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